Casos de estudio Magreb y Sahel junio 2025
Las 133 acciones violentas registradas en el mes de junio, que han dejado un total de 874 víctimas mortales, representan un descenso considerable en los indicadores de actividad y letalidad con respecto a mayo de 2025 (156 ataques y 1.198 víctimas). La violencia disminuye en la mayoría de los países de estudio, con excepciones en el caso de Camerún, donde los ataques aumentan (23), y Benín, donde se mantienen estables (5).
Las claves del mes:
Análisis de las regiones de estudio
A continuación, se ofrece un análisis de la actividad de carácter yihadista en cada una de las zonas de estudio a lo largo del mes de junio de 2025.
Sahel Occidental
En el caso de Burkina Faso, la actividad terrorista disminuyó hasta alcanzar los 38 ataques y 192 víctimas registradas, un descenso considerable con respecto al análisis anterior (41 ataques, 577 víctimas). JNIM mantuvo su presencia como principal actor, con ataques concentrados en regiones como Centre-Nord, Est y Boucle du Mouhoun.
El ataque más letal tuvo lugar el primer día de junio, cuando militantes de JNIM atacaron un destacamento militar en la localidad de Koumbri (Koumbri, Yatenga). Al menos 43 soldados y dos VDP perdieron la vida, incluyendo el jefe del destacamento y su segundo al mando (caso de estudio #). JNIM reivindicó el ataque y publicó un video que mostraba el escenario de la acción. El grupo también afirmó que sus militantes mataron e hirieron a decenas de soldados, incautando un vehículo militar, armas de artillería, morteros, ametralladoras, varios fusiles, munición y motocicletas, entre otros.
Otro evento a destacar tuvo lugar el 20 de junio en Pibaore (Sanmatenga, Centre-Nord), donde JNIM atacó una posición militar, acabando con la vida de 4 soldados y capturando armamento pesado, incluyendo un mortero y rifles PKM (caso de estudio #). Las Fuerzas de Defensa y Seguridad (FDS) y los VDP pusieron en marcha varias operaciones antiterroristas, aunque la presión de JNIM es persistente y se encuentra en auge, especialmente contra objetivos militares.
En Mali, la situación de seguridad se deterioró gravemente durante el mes de junio en términos de letalidad, principalmente a manos de JNIM y Estado Islámico en el Sahel. Las acciones terroristas dejaron un balance de al menos 327 víctimas mortales (entre militares y civiles), reflejando un incremento sustancial en los índices de letalidad en comparación con los 158 fallecidos registrados en mayo del mismo año, a pesar de que el número de atentados (29) se mantuvo constante.
Similar al caso de Burkina Faso, la acción más letal ocurrió el primer día de junio, cuando elementos de JNIM atacaron el campamento militar de Boulkessi (Douentza, Mopti), un asalto que marcó el inicio de una oleada de violencia que se prolongó durante todo el periodo de análisis. El ataque dejó más de 100 soldados y mercenarios muertos (atribuyendo la acción a su rama en Burkina Faso), 22 capturados y una gran cantidad de equipo incautado, incluyendo vehículos militares, morteros, ametralladoras, rifles y otras armas (caso de estudio #). 33 vehículos militares, de los cuales 11 eran blindados, también fueron destruidos. Desde las FAMa se afirmó que los soldados respondieron antes de retirarse y que abatieron a varios militantes en posiciones de repliegue. JNIM consolidó su narrativa publicando fotos del botín y, posteriormente, el 5 de junio, un video del campamento abandonado. El 10 de junio, otro video mostró a 20 soldados capturados, quienes declararon estar bien tratados y pidieron a las autoridades su liberación.
Un día más tarde, JNIM lanzó una serie de ataques coordinados en Tombuctú, incluyendo un coche bomba suicida contra un campamento militar y fuego de mortero sobre el aeropuerto (caso de estudio #). Al menos un soldado y dos civiles perdieron la vida, mientras que las FAMa reportaron haber repelido los ataques, abatiendo a 14 militantes y capturado a 31, además de incautar armamento. JNIM afirmó haber atacado un campamento militar, dos puestos del ejército y el aeropuerto, causando decenas de bajas y capturando rifles y munición. Las imágenes publicadas por JNIM mostraron el equipamiento sustraído y a seis de sus militantes fallecidos, considerados mártires.
Su rival en la zona tampoco se ha quedado atrás. El 4 de junio, Estado Islámico en el Sahel asaltó el campamento militar de Tessit (Ansongo, Gao), asesinando a 42 soldados y 11 civiles (caso de estudio #). La fuerza aérea maliense respondió con bombardeos, dejando, según las FAMa, 41 militantes abatidos, incluido un líder nigerino de la organización, Mamoudou Akilou, y cuatro de sus segundos al mando.
Entre el 18 y el 21 de junio, las FAMa llevaron a cabo operaciones en múltiples regiones (Gossi, Tombuctú, Gao, Mourdiah, Léré, Nampala, Sokolo y Farabougou) bajo el nombre “Dougoukoloko”. Estas acciones permitieron liberar a tres rehenes y neutralizar a ocho terroristas, además de recuperar varios materiales. Además del moderado éxito, algunas informaciones apuntan a una mala coordinación que llevó a ataques erróneos contra fuerzas rusas aliadas cerca de Gao y civiles en Tombuctú, lo que pone en evidencia las dificultades operativas del ejército maliense.
Otro país gravemente afectado por la violencia terrorista es Níger, que se enfrentó a un volumen considerablemente menor de ataques (23) con respecto al análisis anterior (41) pero con una violencia similar (237 en junio, 266 víctimas en mayo), liderada principalmente por Estado Islámico en el Sahel. Los eventos clave del mes, concentrados en las regiones de Tillaberi y Dosso, reflejan una capacidad operativa avanzada de la organización, con ataques coordinados contra fuerzas tanto militares como contra objetivos civiles.
Uno de las acciones más relevantes tuvo lugar el 19 de junio, cuando EI-Sahel atacó al ejército de Níger y la Guardia Nacional en Banibangou (Tillaberi), tras un bombardeo de distracción en In-Ates. Los militantes asaltaron posiciones militares en la periferia de Banibangou, acabando con la vida de 34 militares e hiriendo a 14 (caso de estudio #). El grupo afirmó haber destruido 25 vehículos militares, capturado 5 y confiscado una gran cantidad de armamento, incluyendo rifles AK-47, lanzagranadas QLZ-87, granadas antitanque y ametralladoras PK. El grupo perdió a cinco de sus militantes durante la operación. Tras el ataque, EI-Sahel se retiró hacia la frontera con Mali (caso de estudio #)
Un día más tarde, durante la oración del viernes, varios terroristas presumiblemente de EI-Sahel atacaron la aldea de Manda (Tera, Tillaberi), acabando con la vida de 69 civiles e hiriendo a otros 25. Los atacantes incendiaron varias viviendas y dos civiles fallecieron posteriormente a consecuencia de sus heridas, elevando el total de víctimas a 71 (caso de estudio #). El mismo día, yihadistas del mismo grupo se enfrentaron a la milicia comunal de Tondikiwindi (Ouallam, Tillaberi), dejando un balance de 22 milicianos muertos (caso de estudio #). La masacre a civiles se extendió hasta el 22 de junio, cuando EI-Sahel atacó la aldea de Abdouladji (Dioundiou, Dosso), también durante la oración, acabando con la vida de 17 civiles (caso de estudio #).
Lago Chad
Nigeria disminuyó su balance de actividad terrorista durante el mes de junio si se compara con el análisis anterior, aunque las dinámicas continuaron comprometiendo el entorno de seguridad por una serie de ataques perpetrados principalmente por Boko Haram e ISWAP, que tuvieron un balance total de 17 ataques y 62 víctimas.
Algunos de los eventos más destacables incluyen el intento de invasión de una base naval en la zona de Fish Dam, Lago Chad, en Baga (Kukawa, Borno) el 18 de junio por presuntos combatientes de Boko Haram, con el objetivo de destruir los Swamp Boggeys de la Armada. La Armada de Nigeria, reforzada con apoyo terrestre y aéreo, repelió el ataque, abatiendo a decenas de atacantes. Algunos soldados resultaron heridos, y se informó de la destrucción de una ambulancia y dos vehículos auxiliares. Las fuerzas militares recuperaron morteros e IEDs.
Otro ataque destacable tuvo lugar el 20 de junio, cuando una terrorista suicida de ISWAP/Boko Haram detonó explosivos en un punto de comida en Konduga (Borno), terminando con la vida de 11 personas (incluida ella misma) e hiriendo a un número no especificado de civiles (caso de estudio #). Las estimaciones iniciales varían entre 10 y 24 fallecidos, pero los registros oficiales confirman 11 víctimas mortales.
Camerún es el único de los países de estudio que ha sufrido un aumento considerable de su actividad terrorista, alcanzando el registro de 23 ataques mortales que dejó un balance de 47 fallecidos a consecuencia de las acciones de ISWAP y Boko Haram.
Entre las acciones a destacar se incluye la ocurrida el 8 de junio, en Sagme (Fotokol, Logone-et-Chari), cuando militantes atacaron un campamento militar con un dron suicida, terminando con la vida de cuatro soldados y destruyendo el campamento por completo (caso de estudio #).
Para finalizar, el análisis de junio muestra una estabilización de la actividad violenta en el Golfo de Guinea por la actividad de JNIM en las zonas fronterizas con Burkina Faso.
Una de las acciones a mencionar en el caso de Benín ocurrió el 3 de junio, cuando la Guardia Nacional se enfrentó a militantes de JNIM cerca del Parque W, en Birni Lafia (Karimama, Alibori), durante una operación ofensiva. El choque resultó en la neutralización de diez militantes. Por su parte, en la noche del 8 al 9 de junio, decenas de terroristas de JNIM cruzaron la frontera desde Burkina Faso y atacaron el campamento de Kpinkankandi (Kpékankandi, Kpendjal), en Togo. Dos soldados togoleses resultaron heridos, mientras que al menos seis terroristas fueron abatidos y otros tres capturados. Los atacantes se retiraron llevándose a varios de sus fallecidos. Además, se incautaron 49 motocicletas, armas y munición. Este campamento ya habría sido blanco de ataques entre 2022 y 2024, con grandes pérdidas para las fuerzas togolesas, incluyendo la muerte de cerca de 20 soldados en julio de 2024.
Norte de África
El norte de África mantuvo la ausencia de ataques terroristas en el mes de junio, consistente con la tendencia general a lo largo de 2025.
Perspectiva regional
A nivel regional, las dinámicas del conflicto en el Sahel continúan evolucionando. Wagner anunció su retiro de Mali, aunque la presencia del Africa Corps permanece activa en el país. JNIM ha reivindicado ataques contra este último desde hace tiempo, intensificando una narrativa de resistencia. En un comunicado reciente, JNIM afirmaba que el anuncio “viene a contradecir las afirmaciones de Bamako que negó su presencia, exponiendo su discurso soberanista […] los muyahidines han logrado varias victorias […] las afirmaciones sobre nuestras derrotas son falsas”. Además, el grupo advirtió a los rusos, instándolos a “aprender de las lecciones pasadas como en Afganistán”, señalando que “sus masacres crean una detestación que supera la dirigida a los países occidentales y sus aliados”. JNIM también anunció “las premisas de la victoria” a los pueblos de la región, llamándolos a “ser pacientes” frente a los desafíos actuales.
En Burkina Faso, cabe destacar la recuperación del control por parte del ejército del campamento militar en la ciudad de Diapaga el 9 de junio, tras el abandono del sitio por parte de JNIM, que lo había capturado a mediados de mayo. No obstante, la reducción de ataques a gran escala no parece ser el resultado de operaciones militares efectivas ni reflejar una mejora sustancial en el entorno de seguridad. Se baraja que JNIM esté haciendo una pausa tras un intenso período de ataques desde comienzos de año o haya desplazado sus esfuerzos hacia Mali. Durante una visita a las fuerzas en la región Centro-Sur el 15 de junio, el presidente Capt. Traoré anunció que las operaciones militares se incrementarán y reafirmó su negativa a negociar con los insurgentes, reforzando la postura firme del gobierno contra los grupos armados.