Observatorio de atentados yihadistas de octubre de 2024

Agentes de policía junto a la comisaría bosnia en la que se produjo el apuñalamiento por parte de un menor radicalizado. Imagen: AP Photo/Edvin Zulic.

1. Análisis

Al contrario de lo que suele ser habitual, octubre ha sido un mes relativamente tranquilo en lo que concierne a la actividad yihadista en términos globales. Si bien el número de acciones terroristas en regiones como África Occidental sigue siendo muy elevado, en otros espacios geográficos como el Sur de Asia, Oriente Medio, África Oriental e incluso Europa, el volumen de acciones terroristas materializadas a o largo del último mes se ha disminuido en mayor o menor medida.

En este sentido, el acontecimiento más importante a destacar por su singularidad fue el ataque cometido por un menor de 15 años en una comisaría en Bosanska Krupa (Bosnia y Herzegovina), quien apuñaló mortalmente a un policía hasta que fue reducido por otros agentes (caso de estudio #20). La investigación realizada tras el ataque llevó a las fuerzas y cuerpos de seguridad hasta otras ocho personas que fueron detenidas, algunas de las cuales al parecer habrían instigado el proceso de radicalización del menor.

Este ataque cometido en Europa Oriental presenta patrones muy similares a los que ya se están viendo desde hace algunos años en la parte más occidental del continente, donde ya es más que frecuente la participación directa de menores en acciones terroristas materializadas o planeadas tras adentrarse en procesos de (auto)radicalización. Asimismo, otro elemento común de este último ataque respecto a las acciones terroristas perpetradas en el último lustro es la tipología del ataque, ya que el arma utilizada por el menor en Bosnia y Herzegovina fue un arma blanca.

Debemos tener en cuenta que a lo largo de 2024 este tipo de ataques acaecidos en Europa ha tenido un repunte significativo respecto a los últimos años, si bien es cierto que no pocos de estos atentados de inspiración yihadista han ido dirigidos sobre objetivos israelíes en suelo europeo. Sirva para ilustrar esta realidad el ataque acontecido en septiembre en el consulado israelí en Múnich. Tampoco hay que pasar por alto que este tipo de acciones pueden estar motivadas e influenciadas en gran medida por las continuas campañas propagandísticas de grupos terroristas, en especial Daesh, que desde hace más de un año está instrumentalizando la causa palestina para hacer llamamientos a modo de venganza sobre Israel y sus aliados occidentales. En este sentido, el ejemplo más reciente de ello, lo hemos encontrado este último mes en un póster distribuido por Daesh a través de Al Azaim Media, una plataforma conectada con su rama regional en el Khorasan (IS-K), que lleva como título “O lone wolf, where are you?” (“Oh lobo solitario, ¿dónde estás?”). La intención de este tipo de propaganda tan recurrente durante el último año es incitar a que individuos radicalizados que comparten ideales con la organización terrorista den el paso hacia la comisión de actos terroristas en diferentes regiones, siendo habitual que se haga especialmente hincapié en Israel y Europa.

En el caso específico de Israel, si bien es cierto que Daesh ha tratado de aprovechar la inestabilidad regional para atacar directamente al corazón de su enemigo, lo cierto es que de momento no ha tenido mucho éxito. Hasta la fecha, han sido más los ataques que han conseguido evitarse que los que el grupo terrorista y sus simpatizantes han llegado a materializar de forma puntual y con un impacto muy limitado. No obstante, esto no significa que Israel esté consiguiendo sofocar la amenaza terrorista que planea sobre el país especialmente durante el último año, ya que durante este período el país ha sufrido una veintena de ataques islamistas sobre su territorio en los que han sido asesinadas 34 personas. Sin ir más lejos, en octubre se dieron dos de ellos: el primero en la estación central de autobuses de Beer Sheva donde una agente de policía fue asesinada en un tiroteo y apuñalamiento múltiple, y el segundo en Tel Aviv, ciudad en la que un terrorista atropelló con un camión liberadamente a una multitud que se congregaba junto a una parada de autobús, asesinando a otra persona y dejando al menos tres decenas de heridos de diversa gravedad.

En relación a lo que se comentaba anteriormente sobre la creciente implicación de menores en actividades terroristas, el desafío que esto plantea tanto desde una perspectiva social como también en términos securitarios es enorme. Hasta fechas recientes, los menores eran objetos pasivos dentro de procesos de radicalización, sin embargo en la actualidad están desempeñando, entre otras muchas funciones, la de agentes radicalizadores sobre otros menores y adultos jóvenes aprovechando especialmente los elevados conocimientos que tienen sobre las nuevas tecnologías. España es un ejemplo que ilustra a la perfección esta realidad generalizada en toda Europa, dándose especialmente tanto en 2023 como en lo que llevamos de 2024 diferentes operaciones contraterroristas que han puesto de manifiesto el elevado grado de radicalización de algunos de estos jóvenes, su intensa actividad en labores de captación e incluso la voluntad que tenía alguno de ellos de llevar a cabo de forma inminente una acción terrorista.

Para terminar, a lo largo del último mes se ha producido al menos un atentado de inspiración yihadista que se ha saldado con la muerte al menos de una persona en un total de 17 países, siendo estos: Irak, Siria, Afganistán, Pakistán, Irán, Tailandia, Mali, Burkina Faso, Níger, Nigeria, Camerún, Chad, Togo, República Democrática del Congo, Somalia y Bosnia y Herzegovina.

2. Metodología

La metodología de la presente investigación tiene como base la búsqueda y el análisis de fuentes abiertas, siendo éstas esencialmente noticias de prensa nacionales e internacionales, informes de instituciones gubernamentales, organizaciones no gubernamentales que trabajan sobre el terreno y comunicados emitidos por los propios grupos terroristas (teniendo en cuenta que la información de éstos no siempre es fiable y siendo contrastada previamente). Dichas fuentes son accesibles al lector y pueden ser consultadas a través del enlace adjuntado en los resúmenes que acompañan a los datos extraídos en cada uno de los casos de estudio registrados. No obstante, existen algunas excepciones en las que se ha decidido no añadir el enlace por motivos de sensibilización y respeto a las víctimas, al tratarse de imágenes que no se considera necesario mostrar.

En la sección que hace referencia a la autoría de los atentados, en determinados casos se puede leer “sin confirmar” junto al nombre de la organización terrorista. Esto sucederá en todos aquellos casos donde ningún medio oficial vinculado a la organización autora haya reivindicado dicho ataque. Pese a la falta de esta confirmación, existen vínculos, modus operandi y características comunes con otros antecedentes que pueden ayudar a determinar la autoría, aunque siempre exista el riesgo de equivocarse en el análisis de la información.

El objetivo último de este observatorio es intentar conocer los máximos casos posibles, sabiendo que resulta imposible plasmar todos ellos por la inaccesibilidad de medios o falta de información en determinadas regiones^[1]. Debido a esta razón, uno de los criterios que debe reunir un atentado para aparecer en esta investigación es que se produzca alguna víctima, dado el escaso (o nulo) eco mediático que tienen aquellos casos en los que por suerte no se producen muertes, excepto en el caso de países occidentales donde sí se incluyen los atentados que no hayan provocado víctimas, así como aquellos otros que presenten unas particularidades propias que requieran su inclusión. El objetivo último es que los datos representados mes a mes permitan mostrar la evolución del yihadismo desde el punto de vista de las organizaciones terroristas suníes que se encuentran bajo el prisma de la yihad global.

Finalmente, se recuerda, como todos los meses, los criterios establecidos a la hora de contabilizar los casos de estudio:

• Atentados que sean perpetrados por organizaciones yihadistas suníes o
• Cometidos por individuos inspirados en su ideología
• Donde al menos se produce una persona fallecida, pudiendo ser el propio terrorista (con las excepciones ya citadas)
• Que estén documentados a través de técnicas OSINT y fuentes contrastadas

3. Tabla con casos de estudio relevantes

[1] A partir del 1 de enero de 2024 únicamente se darán a conocer públicamente aquellos casos de estudio dentro de la base de datos del OIET que resulten de especial interés o relevantes para apoyar las ideas expuestas en los análisis mensuales.